REVISTA GOLF Y PÁDEL BURGOS, Nº 27.
A
nadie se le escapa que la mayoría de los torneos federados y, por tanto,
valederos para el ranking de Castilla y León, se realizan en la provincia de
Valladolid. Los motivos principales, aunque existen otros de menos calado, son
el mayor número de licencias y la céntrica situación geográfica, que hace que
los jugadores que se desplazan desde el resto de provincias tengan que recorrer
distancias muy similares y no demasiado grandes.
Por este motivo, los jugadores de la
provincia de Valladolid suelen acaparar los primeros puestos del ranking -por
méritos propios en algunos casos o por el mayor número torneos disputados en
otros-. Por el contario, competidores de otras provincias con niveles parecidos
y que podrían estar disputando puestos importantes en la clasificación, deben
lidiar con las dificultades ineludibles de los desplazamientos, que hacen a
veces muy difícil su disponibilidad para viajar y luchar por esos puestos.¿Cuál es la solución? Desde luego no resulta
sencilla, pero deberíamos empezar porque los torneos que se disputan en todas
las provincias fueran federados o, por lo menos, tuvieran cuadro federado. Los
clubes suelen argumentar que las competiciones federadas se resienten en el número de inscritos y
prefieren que las disputen no federados para así aumentar las inscripciones.
Por eso, la fórmula mixta sería la ideal hasta que el número de jugadores con
licencia crezca suficientemente y lleguen a disputarse los torneos totalmente
federados. Ello haría que los buenos jugadores locales pudieran conseguir
mejores puestos en el ranking sin tener que desplazarse, e incluso que
jugadores de otras provincias se animaran a disputar los torneos para mejorar
su clasificación. Desde la Federación estamos trabajando para mejorar las competiciones
y esperamos que, con ayuda de los clubes, podamos seguir avanzando en este
aspecto.