Hemos tenido la gran fortuna de que una de
las pruebas del mejor pádel del mundo, El Circuito WPT, recalara en nuestra
comunidad y en concreto en la ciudad de Valladolid. Y personalmente no pudo ser
mejor ya que formé parte del equipo de jueces-árbitros teniendo la oportunidad
de compartir jornadas maratonianas de gran pádel al ladito de estos grandes
profesionales.
Dejando al lado el tema competición, me
gustaría centrarme en los por qués y en
las dificultades que entraña que
finalmente sean elegidas las
diferentes sedes de este circuito internacional. La primera, evidentemente,
entra dentro de los presupuestos que se manejan y que las sedes interesadas
intentan buscar patrocinios privados e institucionales para llegar a los
montantes que se exigen. Hablamos de números muy elevados por lo el trabajo
previo para poder conseguir sponsors y patrocinios, es arduo y casi siempre
infructuoso. Al apoyo institucional debe unirse el de empresas y colaboradores
de ámbito local y nacional que apuesten por este tipo de eventos y que vean de alguna forma el retorno de su
inversión. Difícil no, lo siguiente...
Al final, los grandes beneficiados somos
los jugadores y aficionados, que podemos disfrutar de los-as mejores
jugadores-as del mundo al ladito de casa. Y aunque parezca que nosotros no
pintamos nada y que poco podemos hacer para que este tipo de pruebas u otras
menores, recalen en nuestras ciudades, os diré que estamos equivocados. El
apoyo a este deporte que tanto amamos y practicamos, y nunca me cansaré de
repetirlo, pasa por hacernos
"oficiales". Y eso es invertir en nuestra licencia federativa para
que las instituciones tengan números oficiales, las marcas puedan establecer
sus intereses comerciales con estas cifras,
para que las federaciones puedan apoyar, como en este caso, etc, etc..
Somos muy importantes y deben de saberlo, pero no solo porque jugamos al pádel,
sino porque también lo apoyamos. Ojalá podamos decir lo mismo el año que
viene......
Saludos.
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